¿Porqué un documental sobre la Experience?

Los Motivos

Cuando quedó claro que la mayoría de los músicos de la Experience no han tocado juntos, el documental estaba justificado

El fotógrafo Marco Torres Walker ha venido haciendo fotos del Festival Eivissa Jazz desde el año 2000. En ese proceso ha reunido un buen archivo fotográfico y, además, ha descubierto que la fotografía de conciertos, y la de jazz concretamente, es una de las que más le apasionan. Uno de los resultados de esta afición fue la edición del libro “Eivissa Jazz. 25 anys” que editó el Ayuntamiento de Eivissa. El libro, acompañado de un disco recopilatorio de varios temas de diferentes ediciones del festival, fue una idea personal que consiguió llevar a cabo en 2013. Justo cuando el festival cumplía 25 años.

Parece arriesgado condicionar la actuación de un grupo no estable a un solo ensayo

Fue a raíz de la realización del libro que conoció algunos detalles interesantes de la Eivissa Jazz Experience. Entonces supo que en la mayoría de las ocasiones los músicos no habían tocado nunca juntos. Este dato curioso hizo que se interesara por el proceso que seguían para lograr su objetivo. Y sobre todo, le interesó el ensayo. Parecía arriesgado condicionar la actuación de un grupo a un solo ensayo. Visto desde fuera, desde la perspectiva de alguien que no es músico, resulta más que arriesgado fiar todo a una sola sesión de cuatro o cinco horas. Más sabiendo que la mayoría de esos músicos nunca han tocado juntos.

Enseguida surgieron varias preguntas. ¿Cómo lo hacen? ¿Qué hace falta para llegar a tener esa habilidad y seguridad? ¿Lo logran siempre? ¿Qué sucede cuando las cosas no funcionan entre ellos? ¿Como lo viven ellos? ¿Tienen dudas? Todas estas preguntas y algunas más son las que pretende contestar este documental. También se trata de acercar el jazz al público no entendido. Pero sobre todo se trata de mostrar al mundo que algo tan singular sucede en Ibiza. En el festival Eivissa Jazz.  No hay que olvidar el contexto en el que se mueve el festival. En la isla más conocida por ser uno de los centros mundiales de la música electrónica se organiza un festival de jazz cada verano. Así que es interesante mostrar que al mismo tiempo que las pistas de baile son animadas por algunos de los más famosos dj, un escenario alberga algunas figuras del jazz nacional e internacional. Es bueno ver como coexisten las dos manifestaciones.